José y Vicky | Boda en Miajadas

El pasado sábado 30 de agosto tuve el privilegio de ser la fotógrafa del día más especial de esta pareja. No hay palabras suficientes para describir la emoción que sentí al capturar cada instante de amor, risas y felicidad de esta unión tan esperada.

La ceremonia, que se celebró en Miajadas, fue un reflejo del amor puro y profundo que se tienen. Cada mirada, cada gesto, estaba impregnado de una conexión única que solo los que los conocemos bien podemos entender. Como fotógrafa, mi objetivo siempre es atrapar la esencia de las personas, y en esta boda, cada clic de mi cámara parecía detener el tiempo, guardando para siempre la magia de esos momentos.

Tras la ceremonia, nos trasladamos a los Salones Eusebia en Santa Amalia, donde la celebración continuó con un ambiente lleno de alegría. El lugar estaba decorado con tanto cariño que parecía un sueño. Las luces y las risas de los invitados hicieron que cada fotografía vibrara con vida.

La sesión de fotos de los novios en el parque de Santa Amalia. La laguna, con su calma y su reflejo sereno, fue el telón de fondo perfecto para capturar su amor. La luz dorada del atardecer bañaba sus rostros mientras se miraban, y juro que en esos instantes el mundo parecía detenerse solo para ellos.

Ser testigo de esta boda no solo como fotógrafa, sino como amiga, ha sido un regalo que llevaré en el corazón siempre. Ver a mi amiga radiante, con una sonrisa que iluminaba todo a su alrededor, fue un recordatorio de lo hermoso que es el amor cuando es verdadero. Estas fotos no son solo imágenes; son pedacitos de su historia, de su promesa, de un día que nunca olvidaremos.

¡Gracias por dejarme ser parte de este capítulo tan bello de vuestras vidas! Que esta nueva etapa esté llena de amor, aventuras y momentos mágicos.

Con todo mi cariño,
Desirée Rayego